
Y son por esos instantes que valen la pena arriesgarse una vez más a seguir adelante y vivir intensamente para encontrar nuevamente eso, el buscarlo se vuelve adictivo y codiciado... porque te da la oportunidad de valorar y disfrutar esos momentos de dicha.
Vivo para ello, lucho por ser feliz y eso seguiré haciendo; correré y me aferraré a seguir sintiendo en mi alma y cuerpo esas sensaciones, jamás me dejaré vencer; no perderé la fe. Aunque muchas veces mi panorama sea gris, tengo la seguridad de que la felicidad me está esperando en alguna parte de este gran mundo.
Porque alguna vez una voz me dijo "habiendo tantos millones de personas.... que te hace pensar que sólo una pueda llenar tus expectativas sino te arriesgas a buscarlo, intentarlo y arriesgarte". Y es verdad, lucharé por seguir siendo yo misma y me amen como soy, con mis defectos, cualidades, debilidades y fortalezas.
Te sigo buscando destino, te sigo buscando felicidad y no me rendiré hasta encontrarte, tenerte en mis brazos y volverte a disfrutar.
http://www.youtube.com/watch?v=1AJmKkU5POA
ResponderEliminarLa vida está llena de momentos, algunos difíciles y dolorosos y otros llenos de alegría y dicha.
ResponderEliminarSin embargo no hay mucha diferencia entre dicha y sufrimiento, pues si lo analizamos objetivamente esta última sensación únicamente es referente para comprender la primera. A decir verdad, necesitamos tanto los momentos amargos como los dulces, de lo contrario no sabríamos en realidad la diferencia entre alegría y tristeza.
Mientras corremos y luchamos por buscar la felicidad no nos detenemos a pensar que muchas ocasiones esa carrera y ese round que estamos peleando, ya es la felicidad.
Pero cómo? Si la felicidad es algo que pocas personas logran conseguir. Por qué? Si la felicidad solo se logra una vez que se tiene todo.
La respuesta es sencilla al mismo tiempo que atravesamos por un periodo difícil en nuestras vidas que parece oscuro y que nada tiene solución, comenzamos a idear soluciones y respuestas o alternativas para nuestros problemas, y es en ese instante que nace en lo más profundo de nuestro ser una sensación de alivio, una sensación cálida y fraternal que nos indica que todo estará bien... ahí comienza la felicidad. En la construcción de la misma.
La vida nos pone sobre la mesa un sin numero de sabores, texturas, fragancias y elementos para que nosotros hagamos las más refinadas y exquisitas combinaciones que nos permitan tener momentos dulces, momentos de dicha, momentos de alegría mientras que sin darnos cuenta, al estar combinando todo lo que la vida nos da, hemos conocido ya, lo que es la felicidad.
Disfrutemos todos los momentos, los amargos y los dulces y agreguemos los ingredientes necesarios para seguir disfrutando de la felicidad que la vida nos ha permitido saborear tantas veces en esta brega de eternidad.
ídem.